La decisión de migrar una infraestructura de cómputo local a Azure está justificada en términos de ahorro, obtención de los beneficios de la nube y en general un entorno de trabajo mucho más eficiente.
Sin embargo, para tener éxito y disfrutar de todas estas ventajas, es fundamental la eficiencia y organización al ejecutar la migración. Por ese motivo, le mostraremos cuáles son los pasos que debe dar para llevar a cabo este proceso correctamente.
Pero antes de iniciar, tenga en cuenta que el ejemplo que usaremos puede que no sea idéntico, de extremo a extremo, a los trabajos de migración de la infraestructura que debe realizar en su empresa, ya que cada organización tiene necesidades particulares.
Por ello, es esencial que examine los requisitos técnicos, la estructura y los requerimientos corporativos antes de tomar decisiones importantes sobre la migración de la infraestructura de cómputo local a Azure.
Por lo general, los pasos que se deben dar para poder realizar esta migración a la infraestructura de nube híbrida de Azure son los siguientes:
El primer paso es comprar Azure como proveedor de servicios, determinar cómo se va a administrar la suscripción y cómo se obtendrán las licencias para servicios y recursos.
Por ejemplo, su negocio puede adquirir una suscripción para Azure con un Partner Directo CSP (Cloud Services Provider) acreditado (Solution Partner Designation para Infrastructure o Modern Work), el cual le pueda apoyar con soporte y conocimiento en demanda o bajo un plan de servicios gestionados.
Un paso muy importante a la hora de desarrollar una infraestructura de Azure, es dar y controlar el acceso de los usuarios a los recursos.
Para hacerlo, se puede utilizar Microsoft 365 para contar con un inquilino (tenant)y un directorio de Azure (Azure Active Directory).
Otro paso esencial para cualquier migración a la computación en la nube es la manera en que el equipo de TI pueda garantizar que las aplicaciones e infraestructura de la organización se puedan recuperar ante desastres e interrupciones.
Para ello, se deben configurar los siguientes elementos:
El siguiente paso es diseñar una estructura de red y establecer la conexión entre la infraestructura de cómputo local de la empresa y Azure.
Es decir, se debe hacer lo siguiente:
En esta etapa se determina de qué forma el equipo de TI mantendrá alineados los requisitos de gobierno corporativo y seguridad con la implementación de servicios de Azure, considerando que traerá un nuevo entorno de operación con aplicaciones web, diversas funciones de Windows Server y otras posibilidades que brinda Microsoft en general como proveedor de Nube.
La gran ventaja, en este sentido, es que Azure ofrece una amplia variedad de controles de gobierno de TI por medio de sus servicios y plataformas, dirigidos a quienes tienen datos y sistemas alojados en su infraestructura, en pequeña, media o gran escala.
Al migrar una infraestructura de cómputo local a Azure, considere que Azure brinda una amplia variedad de funcionalidades y herramientas de seguridad, como:
Migrar una infraestructura de cómputo local a Azure requiere una comprensión profunda de los desafíos de planificación y del costo asociado al ejecutar este movimiento.
Sin embargo, una vez finalizada con éxito al ejecutar los pasos correctos y apoyarse en expertos en el proceso, su empresa podrá ver de inmediato las ventajas en sus flujos de trabajo y operaciones.
Azure es una de las mejores opciones de infraestructura como servicio (IaaS, por infrastructure as a service), plataforma como servicio (PaaS, por platform as a service) y software como servicio en general (SaaS, por software as a service) que encontrará en el mercado, y los siguientes beneficios lo demuestran:
Los servicios en la nube de Azure proporcionan capacidades de protección mejoradas que asegurarán a su empresa frente a nuevas amenazas que desafíen la integridad de su red.
Microsoft Azure puede asegurar máquinas virtuales, servidores Linux y Windows, servidores de puntos finales expuestos, aplicaciones nativas de la nube y su entorno de TI.
La naturaleza flexible de la nube significa que es fácil de escalar. Por ello, en lugar de invertir en una infraestructura física adicional en las instalaciones, simplemente se debe solicitar más espacio en el servidor para gestionar el aumento de datos.
Y esto también se aplica a la reducción de la escala de trabajo, porque solo se paga por lo que realmente utiliza con Azure, lo que permite administrar los presupuestos de TI de forma efectiva.
El cumplimiento (compliance) es una de las principales preocupaciones para muchas empresas.
Por suerte, Azure Cloud Services cumple con certificaciones de privacidad relevantes, como el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la Unión Europea y la ISO/IEC 27018 para la protección de datos personales en la nube.
Invertir en migrar una infraestructura de cómputo local a Azure significa ahorrar costos en el cuidado y mantenimiento constante de los servidores.
A esto se suma el ahorro de los costos de electricidad y del espacio físico que obtiene al completar un proceso de migración a la nube y mantener su operación con este tipo de servicios de almacenamiento.
En definitiva, pasarse a la nube es una decisión que requiere la consideración de muchos factores, pero, en última instancia, es una inversión inteligente que mejorará el almacenamiento de datos, promoverá el fácil acceso a las aplicaciones empresariales, garantizará una alta disponibilidad de la información crítica y fomentará la seguridad de las bases de datos.
Al hacerlo con Azure, obtiene ventajas adicionales de un entorno optimizado, que combina lo mejor de la nube pública con la nube privada y que provee una gran variedad de recursos de virtualización del trabajo y acceso a aplicaciones empresariales a través de Internet, como Azure Virtual Desktop (AVD), con claras ventajas a largo plazo ante servicios de cloud computing similares como Amazon Web Services (AWS).
Finalmente, debemos destacar el gran nivel de servicio y soporte técnico que obtendrá al convertirse en cliente de los servicios de computación de Azure, especialmente si lo hace a través de un esquema de managed services (servicios gestionados) provisto por un partner certificado de Microsoft y Azure.
Y para llevar a cabo el proyecto de migración de una infraestructura de cómputo local a Azure de la mejor forma posible, siguiendo los procedimientos recomendados y sin correr el riesgo de un largo tiempo de inactividad de sus recursos informáticos, le invitamos a conocer nuestro portafolio de servicios Azure.