En algún punto, tanto los usuarios privados como las grandes corporaciones necesitan cambiar de ubicación los datos de sus sistemas y aplicaciones por diferentes motivos, como facilitar y optimizar su protección. Esto representa un gran reto: comprender y evitar los riesgos en la migración de datos.
A medida que las empresas crecen, requieren un sistema robusto que pueda administrar todas las áreas de la organización. Para ello, muchas veces buscan otro software o plataforma que responda a las nuevas necesidades de clientes, proveedores y partes interesadas (stakeholders).
Por lo tanto, podemos definir la migración de datos como el proceso de transferir información de un programa a otro.
Esto no siempre es fácil, ya que puede traer una serie de riesgos a los cuales debemos prestar especial atención para mitigarlos y completar un proceso exitoso.
En este post profundizamos en los riesgos en la migración de datos y las buenas prácticas para ejecutar un proyecto de este tipo.
Tipos de migración de datos
La actualización de un sistema o la extensión de un centro de datos a la nube son pasos que pueden brindar beneficios comerciales y operativos. Para la mayoría de las empresas actuales, esta es una evolución natural.
Sin embargo, el tipo de migración determinará cuánto tiempo puede invertir el departamento de TI en el proyecto y cuándo se liberará para abordar otras tareas vitales para la compañía.
Primero, definamos el tipo de migración:
1. Migración de almacenamiento
Se trata del proceso de mover datos de una ubicación existente a otra más moderna para permitir que otros sistemas accedan a ellos.
Esta forma proporciona un rendimiento significativamente más rápido y una escalabilidad más rentable, al mismo tiempo que admite capacidades de gestión de datos.
2. Migración a la nube
Es el proceso de mover datos, aplicaciones u otros elementos desde un centro de datos local a la nube o entre nubes. También implica la ejecución de la migración de almacenamiento.
3. Migración de aplicaciones
Sucede cuando se mueve una aplicación de un entorno a otro. Puede incluir la ejecución de la migración de toda la aplicación desde un centro on-premises a la nube, entre nubes o mover los datos subyacentes de una aplicación a otra alojada por un proveedor externo de software.
Riesgos generales de la migración de datos
La migración de datos puede ser un proceso costoso y complejo. Si no se realiza correctamente, puede provocar la pérdida de datos importantes o la interrupción del sistema.
Aquí le presentamos algunos de los riesgos de migración de datos:
- Pérdida de datos: Si los datos no se migran bajo un esquema riguroso y ordenado, pueden verse afectados o incluso perderse.
- Interrupción del sistema: Una deficiente migración de datos tiende a interrumpir el funcionamiento del sistema y afectar el rendimiento.
- Gastos innecesarios: La migración de datos puede ser costosa, especialmente si se requieren herramientas especiales o se contrata a un experto.
- Riesgo de seguridad de los datos: Si los datos no se migran de forma segura, pueden ser expuestos a terceros no autorizados.
- Conflicto de datos: Si el proceso no se hace correctamente, puede haber conflictos entre los datos existentes y los nuevos.
- Pérdida de funcionalidad: Cuando la migración de datos no se hace correctamente, suelen verse afectadas algunas funciones del sistema.
Para evitar estos riesgos, es importante planear y realizar la migración de datos de forma estratégica, con seguimiento y asesoría de expertos en TI y Ciberseguridad.
Incluso en las plataformas más seguras del mercado, como Azure y Microsoft 365, la Migración puede ser riesgosa si la ejecución no es correcta y rigurosa. Sobre esto profundizaremos a continuación.
Riesgos de una migración de datos de on-premise a Azure
Pasar de modelos on premise o locales a una infraestructura externa y especializada como Azure ayuda a mantener el foco en el core business (negocio central), dejando de lado las inversiones de tiempo y dinero en la gestión de una infraestructura propia, así como todas las complejidades que ello conlleva.
No obstante, como todo proceso de migración de bases de datos, aplicaciones y redes, involucra riesgos que debemos considerar y mitigar, en este caso aprovechando los recursos que Azure provee directamente y apoyándonos en expertos en la gestión de esta infraestructura.
Algunos riesgos a tomar en cuenta son los siguientes:
Pérdida de documentación e información de servidores y bases de datos
En el proceso de extremo a extremo de migraciones de amplios volúmenes de información, como sucede en transiciones de servidores y bases de datos a Azure, las deficiencias en el seguimiento o la ejecución puede conllevar pérdida de datos en algún punto de la operación.
Ante ello, es recomendable apoyarse en Azure Migrate, un recurso que funciona como centro de conectividad para valorar y ejecutar la migración y que es compatible con servidores de Hyper-V y VMware, así como con servidores físicos a gran escala, bases de datos, escritorios virtuales y aplicaciones web.
La centralización provista por Azure Migrate permitirá un mayor control de todo el proceso, a la vez que es un recurso diseñado específicamente para la migración de servidores a Azure, por lo cual está optimizada para resguardar los datos mientras ingresan a este entorno.
Incomunicación de sus redes locales con los recursos de Azure
Durante la migración, debe garantizar que sus redes y recursos como los VPN puedan establecer comunicación con el entorno de Azure para que así pueda existir la retroalimentación de datos.
Esto es posible con el bloque Azure Virtual Networks, que hará un análisis extenso de su infraestructura on-premise para establecer comunicación con sus redes, permitiendo, incluso, entornos híbridos con conexiones Site2Site y Point2Site.
Deficiencias en administración de Azure
La falta de preparación puede considerarse como un riesgo en sí a la hora de hacer una migración a Azure. Es importante tener conocimientos específicos en este entorno para una óptima administración y correcto manejo de los datos dentro del mismo.
En este sentido, puede aprovechar los recursos de autoaprendizaje provistos por Azure, como Microsoft Learning for Azure, o ir un paso más allá y apoyarse en partners certificados de Microsoft que podrán brindarle un servicio gestionado de calidad, capaz de maximizar los recursos disponibles y consolidar la privacidad y protección de datos.
Posibles riesgos al migrar datos de on-premise a Microsoft 365
Al migrar buzones de email, contactos y calendarios al entorno de Microsoft 365, considere los siguientes elementos de riesgo y las prácticas recomendadas a continuación para evitarlos:
Deficiente estimación de tiempos en migraciones masivas
Los buzones de correo electrónico suelen contener información crítica para las empresas y las partes interesadas (stakeholders), por lo cual es esencial proyectar cuándo estarán 100% disponibles en el nuevo entorno luego de la migración.
No establecer un riguroso mapeo de este elemento puede afectar los flujos de trabajo y generar un proceso de migración con incertidumbre y sin el control necesario.
Microsoft ofrece varias proyecciones al respecto, que puedes consultar aquí.
No obstante, factores como la densidad y tipos de datos pueden influir en gran medida en el cumplimiento o no de estos plazos.
Incluso, errores de configuración pueden generar efectos negativos y demoras severas en la operación, lo cual abordaremos como un riesgo adicional a continuación.
Demoras y reprocesos por errores en la preconfiguración
Para migrar todos los buzones de correo electrónico a Microsoft 365 siguiendo las mejores prácticas, es necesario optar por una migración preconfigurada.
Las deficiencias en este primer paso se traducirán luego en reprocesos, paros en el flujo de migración y otros problemas que demorarán la operación e incluso pueden propiciar pérdida de información de interés.
Para una óptima preconfiguración, es necesario considerar elementos como:
- Sincronizar cuentas entre el dominio local de Active Directory y Microsoft 365;
- Solo preconfigurar buzones de usuarios y recursos, ya que los contactos y usuarios deben migrarse directamente con la sincronización de directorios;
- Aumentar las conexiones al sistema de correo electrónico de origen, con la finalidad de optimizar el rendimiento de la migración.
Problemas técnicos a nivel de red local
Que su red local sea veloz no significa, necesariamente, que la migración será rápida. Más importante aún es que sea estable y esté libre de errores técnicos, ya que, de existir estos problemas, el tiempo de migración se extenderá a raíz de la corrección de deficiencias, afectando de manera significativamente el rendimiento.
Estos riesgos demuestran la importancia del asesoramiento y apoyo externo tanto para la preparación de la migración cómo para la gestión del servicio y los recursos dentro de Microsoft 365.
Factores de interés al migrar datos de una nube como AWS a Azure
Los principales riesgos de una migración de datos de una nube como AWS a Azure son la pérdida de los datos o la falta de acceso a los mismos.
También existe el riesgo de que los datos de redes y servidores se corrompan durante la migración.
Otras amenazas incluyen la incompatibilidad de los sistemas, la falta de conocimiento de la tecnología de Azure y el aumento de los costos.
Para minimizar la exposición a fallas, es recomendable realizar la migración de datos con la ayuda de un experto en la materia.
Cómo realizar un proceso de migración de datos exitoso
Para llevar a cabo una migración de datos exitosa, es importante planear y preparar el proceso con el fin de minimizar el impacto en el funcionamiento diario de la empresa.
La planeación debe incluir el análisis de los diferentes tipos de datos a migrar, así como el diseño de un plan de contingencia para garantizar que los datos se puedan recuperar en caso de un error.
Una vez que se haya planeado la transferencia de datos al sistema de destino, es importante ejecutarla de manera estricta de acuerdo con la agenda.
Durante el proceso de migración, también juega un papel clave la supervisión del progreso y realizar pruebas regulares para asegurarse de que los datos se están migrando de manera ordenada.
En general, para evitar los riesgos en la migración de datos es importante seguir estos pasos:
- Planear la migración de datos.
- Ejecutar el proceso de acuerdo con el plan.
- Supervisar el progreso de la migración de datos.
- Hacer pruebas regulares de los datos migrados.
- Realizar un seguimiento de los datos.
- Implementar un plan de contingencia.
- Verificar los datos migrados.
- Validar los datos.
- Respaldar los datos migrados.
- Documentar el proceso de migración.
Errores comunes en la migración de datos
Estos son algunos de los errores más comunes que se cometen en el proceso de migración de datos:
1. Migración incompleta
Es posible que no todos los datos se migren correctamente a la nueva base de datos.
2. Datos perdidos
Es probable que algunos datos se pierdan durante la migración.
3. Datos corruptos
Existe el riesgo de que algunos datos se corrompan durante la migración.
4. Aplicaciones no compatibles
Hay riesgo de que algunas aplicaciones no sean compatibles con la nueva base de datos.
5. Problemas de rendimiento
Es probable que la nueva base de datos no se ejecute de forma óptima.
6. Seguridad comprometida
El riesgo a comprometer la seguridad de la nueva base de datos es un aspecto que se debe tomar muy en cuenta para evitar la pérdida de información sensible.
7. Datos duplicados
Existe la posibilidad de que algunos datos se dupliquen durante el proyecto de migración.
8. Acceso limitado
Es posible que el acceso a la nueva base de datos se limite afectando el acceso a todos los usuarios relevantes.
«Desenredo» de datos
Para trasladar las aplicaciones y los datos a un entorno más favorable, es recomendable «desenredar» la información o, dicho de otra forma, estructurarla bajo un orden lógico.
Si las empresas dedican algún tiempo a abordar los desafíos de los datos y las aplicaciones al principio de un proyecto, pueden mejorar la gestión de estos y permiten la movilidad de la información, evitando los riesgos en el proyecto de migración de datos.
Considerando todo lo dicho en este post, establecer políticas de seguridad de alto nivel, sostenibles a largo plazo, es fundamental para que su organización esté preparada para potenciales proyectos de migración de grandes volúmenes de datos.
Tener muy claras las cargas de trabajo durante estos procesos, los principales riesgos y las complejidades particulares de su organización resulta una necesidad imperante.
Si desea obtener más información sobre cómo recibir soporte experto para sus necesidades específicas en cuanto a migración de datos, comuníquese con nosotros para conocer los servicios que podemos ofrecerle.